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Y te levantas,y vas directa hacia el télefono.Tal vez por fin se haya dignado a mandarte un mensaje.Igual hoy es tu día de suerte. Pero no hay nada...Solo un par de mensajes de publicidad,esos que abres,lees la primera línea,y despúes cierras la pantalla del télefono.Ójala fueramos simples sms.¿Que sencillo no?Podríamos borrar los mensajes enviados,esos que nunca tendríamos que haber mandado,y ...¡magia!Opciones...eliminar mensaje.Aquí no ha pasado nada.O dejar en borradores aquello que nunca te atreves a mandar pero lo tienes de reserva.¿Y qué decir de la bandeja de entrada?Guardar los mensajes de amor,y eliminar los malos recuerdos.Así de fácil,así de sencillo,y...así de imposible. Pero hoy no,no tengo tiempo de subirme a una nube,tiro el télefono encima de la cama y caigo yo sobre ella.Miro al techo...<<Joder!que te cuesta?es un puto mensaje,dime que me quieres,escríbemelo,yo te rellenaré el saldo que te haya costado envíarlo,¡que coño!te meteré saldo extra...escríbelo por favor,necesito leerlo>>Y en realidad,sabes que eso no pasará,por lo menos no hoy,mañana,volveré a levantarme con las mismas prisas.Lo sé.